lunes, 1 de marzo de 2010

Aforismos de Antonio Machado



Antonio Machado es uno de los poetas más importantes de la literatura española pero no sólo se dedicó a la poesía donde destacó con diversos libros (tal vez el más conocido sea Campos de Castilla) y que en cierto modo representa la unión entre la generación del 98 y la del 27 como lo demuestran los versos dedicados a Lorca tras su muerte

Muerto cayó Federico

-sangre en la frente y plomo en las entrañas-

… Que fue en Granada el crimen

sabed -¡pobre Granada!-, en su Granada.


Además, Machado escribió obras de carácter ensayístico como Consejos, sentencias y donaires de Juan de Mairena y de su maestro Abel Martín de la cual hemos estudiado algunos aforismos en clase.


Aprendió tantas cosas –escribía mi maestro, a la muerte de un su amigo erudito–, que no tuvo tiempo para pensar en ninguna de ellas.

*

No olvidéis que es tan fácil quitarle a un maestro la batuta, como difícil dirigir con ella la quinta sinfonía de Beethoven.

*

También quiero recordaros algo que saben muy bien los niños pequeñitos y olvidamos los hombres con demasiada frecuencia: que es más difícil andar en dos pies que caer en cuatro.

*

Decía mi maestro que deseaba morir sin llamar la atención de nadie; que su muerte pasase completamente inadvertida. Un mutis bien hecho –añadía aquel buen farsante– no debe hacerse aplaudir.

*

Aprende a dudar, hijo, y acabarás dudando de tu propia duda. De este modo premia Dios al escéptico y confunde al creyente.

*

Cuando los hombres acuden a las armas, la retórica ha terminado su misión. Porque ya no se trata de convencer, sino de vencer y abatir al adversario. Sin embargo, no hay guerra sin retórica. Y lo característico de la retórica guerrera consiste en ser ella la misma para los dos beligerantes, como si ambos [9] comulgasen en las mismas razones y hubiesen llegado a un previo acuerdo sobre las mismas verdades. De aquí deducía mi maestro la irracionalidad de la guerra, por un lado, y de la retórica, por otro.

*

¿Un arte proletario? Para mí no hay problema. Todo arte verdadero será arte proletario. Quiero decir que todo artista trabaja siempre para la prole de Adán. Lo difícil sería crear un arte para señoritos, que no ha existido jamás.


*

Fugit irreparabile tempus. He aquí un latín que siempre me ha preocupado hondamente. Pero mucho más este dicho español: dar tiempo al tiempo. Meditad sobre lo que esto puede querer decir.

*

Sólo en el silencio, que es, como decía mi maestro, el aspecto sonoro de la nada, puede el poeta gozar plenamente del gran regalo que le hizo la divinidad, para que fuese cantor, descubridor de un mundo de armonías. Por eso el poeta huye de todo guirigay y aborrece esas máquinas parlantes con que se pretende embargarnos el poco silencio de que aún pudiéramos disponer.


Escoge alguno de los aforismos y coméntalo. No olvides copiarlo y explicarlo, aprovecha también para dar tu opinión.


2 comentarios:

  1. No olvidéis que es tan fácil quitarle a un maestro la batuta, No olvidéis que es tan fácil quitarle a un maestro la batuta, como difícil dirigir con ella la quinta sinfonía de Beethoven.

    EXPLICACIÓN:
    Segun Machado, es fácil quitar una batuta a un maestro físicamente hablando. Pero, el problema esque no te sirve de nada si no sabes hacerla servir. Para demostrar esto utiliza una ironía que es la segunda parte del aforismo "como difícil dirigir con ella la quinta sinfonía de Beethoven". Por lo tanto debes dejar a los profesionales hacer su trabajo y no lo intentes hacer tu si no lo sabes hacer.

    POSICIONAMIENTO:
    Creemos que este aforismo es cierto, porqué la gente intenta hacer cosas para las cuales no esta preparada ni formada y puede ser perjudicial y por lo tanto hay que dejar hacer a la gente que sabe, es decir, a los profesionales. Puesto que cada persona se especializa en algo y ofrece sus conocimientos al mundo. Una persona que quiere hacer todo es una persona pretenciosa.

    Ainoha Barreiro
    Susana Felgueiras

    ResponderEliminar
  2. Aprendió tantas cosas –escribía mi maestro, a la muerte de un su amigo erudito–, que no tuvo tiempo para pensar en ninguna de ellas.


    *

    Este aforismo nos da a entender que aprender sin pensar luego en lo aprendido, no sirve de nada. La persona inteligente no es aquella que sabe más en cantidad, sino aquella que sabe utilizar sus conocimientos. Por ejemplo, una persona puede estar toda su vida estudiando pero si después no lo sabe utilizar, ha perdido el tiempo.
    Encontramos paradojas que nos hacen dudar a la hora de entender la frase, ya que los verbos "pensar" y "saber" normalmente están relacionados entre si, y aquí nos los presentan como una contradicción.
    Pensamos que el aforismo esta muy bien argumentado ya que la finalidad de aprender es utilizar lo aprendido.

    Lara Martinez y Adriana Farré
    2n ECO B

    ResponderEliminar